Tú puedes criar genios (genialidad = entrenamiento + motivación)

El título de esta entrada del blog (“Tú puedes criar genios”) está tomado del título del libro escrito por Laszlo Polgar publicado en 1989. En él se describe cómo se puede “formar un genio” defendiendo la teoría de que "un genio no nace, sino que se hace". Este húngaro ha pasado a la historia por elaborar un proyecto educativo para criar genios, que, además, son felices (según el autor). Laszlo Polgar quería poner a prueba una controvertida hipótesis que ya había expuesto en su libro Bring Up Genius! (Educa genios). Tras haber examinado numerosos casos de jóvenes prodigios – como el de Mozart, por ejemplo – pensaba que un “genio” no necesariamente nacía con ese “don”, sino que podía formarse con una adecuada educación. 

En la Hungría de 1970, una profesora (Clara) y un pedagogo (el propio Polgar) coincidían en su teoría sobre la educación de los niños y “concertaron” una boda con la idea de llevar a cabo este experimento educativo. Tuvieron tres hijas. Ellos defendían que la mejor educación para sus hijas debería provenir de ellos mismos, dado que ambos poseían conocimientos pedagógicos y psicológicos. Sus padres decidieron no enviarlas al colegio y proporcionarles una educación por su propia cuenta, con un mejor aprovechamiento del tiempo y una mayor eficacia de las clases. Ellas harían sólo los exámenes obligatorios a final de curso. Recibieron clases de natación; luego jugaron al ajedrez y estudiaron las materias escolares. También practicaban pin-pong y aprendieron varios idiomas. 

El campo elegido para demostrar su hipótesis fue el ajedrez. Las tres hijas (nacidas en Budapest) han acabado siendo tres genios de esta disciplina: Susan, Judit y Sofia Polgar. 

Lazlo aún quería llevar a cabo una segunda fase en su experimento: adoptar varios hijos y, educándoles con el mismo método, conseguir que éstos alcanzaran los mismos logros que sus hermanas. De esa forma probaría que el éxito y la inteligencia es puramente una cuestión de educación, sin que la genética o el sexo tengan apenas nada que ver en ello. Lamentablemente, no pudo llevarlo a cabo: "ya que las circunstancias no les permitirían asumir la responsabilidad de adoptar tres más y ya no tenían la edad adecuada, y con tres hijas con esas carreras sería imposible dedicarles la atención necesaria".

El hecho de que el ajedrez entrara en la vida de estas chicas es por casualidad, ya que fue Susan, con cuatro años, la que descubrió el juego de ajedrez en el armario.

Susan Polgar (1969; de las tres es la que ha obtenido más reconocimientos) dirige, en la Universidad de Texas Tech, el Instituto SPICE (Susan Polgar Institute for Chess Excellence). Es escritora y promotora del ajedrez. Fue la primera mujer en ganar el título de Gran Maestro en una competición normal. Fue campeona mundial de ajedrez en la categoría femenina.

Sofía Polgar (1974) ganó un torneo en Roma, con 14 años, donde participaban  varios prestigiosos Grandes Maestros, como Karpov y Kasparov.

Judith Polgar (1976) se convirtió en maestra de ajedrez a la edad de 15 años, batiendo el récord del mítico Bobby Fisher. Recibió el título de Gran Maestro y es la ajedrecista número 1 de categoría femenina y la 43ª del ranking absoluto mundial. Es considerada una de las mejores jugadoras de ajedrez de la historia. Es quien ha alcanzado mayor fama. En parte, por su negativa a disputar torneos exclusivamente femeninos.

Este método ha sido criticado por todos los pedagogos del mundo. Yo le veo dudas éticas, pero me parece que queda bastante demostrada su teoría, la cual comparto en gran medida.

Parece ser que las niñas recibieron una educación equilibrada y brillante, alejando a  las niñas de ese concepto de “genio” sin habilidades sociales que todos tenemos en mente.